14 de junio de 2012

Las lágrimas del alma.


LLORAMOS PORQUE SOMOS CAPACES DE SENTIR.
LAS LÁGRIMAS SON UN LENGUAJE MÁS DEL ALMA








Las lágrimas son gotas de agua que brotan desde del alma. También somos AGUA y nuestro cuerpo a través de ellas también se expresa...
Dejémoslas fluir y ellas nos liberarán de la pesadumbre, no debemos avergonzarnos, ni siquiera cuando estás son de auto-compasión, ni siquiera si son de rabia, ni siquiera si son de impotencia, de frustración o de dolor…hay que liberarlas.
Las lágrimas se escapan, a veces,  de nuestros ojos como si fueran una fuente inagotable…imparable, también cuando la  desesperación de apodera de nosotros y siempre tienen un sentido constructivo, son una forma de expresión de lo que sentimos...
Y sentir... ¡¡¡es tan importante¡¡¡¡
Las lágrimas brotan por los ojos desde el corazón, cuando este chakra se ve afectado lloramos ya que  tanto el amor como la compasión viven ahí.
No somos menos fuertes ni menos valientes por derramarlas… tenemos mucho que perdonarnos para llegar al amor incondicional, para llegar al fondo de nuestro ser…y esto supone un sufrimiento, es parte del camino y de la integración del Ser. 
Quien no es capaz de llorar tampoco es capaz de emocionarse en el amor. 
El dolor y la compasión son hermanos del amor.  La emoción forma parte de nuestra existencia en este plano terrenal, lloramos por empatía, lloramos por amor, lloramos por ser conocedores, lloramos de agradecimiento, lloramos de alegría y no por eso somos menos que quien no llora, tampoco más…las lágrimas son un lenguaje más del alma que se expresa de mil modos.
Si hacemos conscientes nuestras lágrimas, si sabemos que son derramadas desde dentro y analizamos de donde procede la emoción, sentiremos como poco a poco nos hacen libres.

Cuando el alma se serena, cuando estamos en el centro y miramos a nuestro alrededor...el Ser  sigue vertiendo lágrimas, estas lágrimas son por el Mundo...que ignorante y ciego de sí mismo se olvidó de llorar...y de los que lloran.



Namasté, queridos Maestros, todos y cada uno de vosotros.